Tras un frustrado plan playero, pude escaparme con mi chico a Sevilla unos días a visitar a su familia.
Solo pude disponer de una mañana para visitar la capital y vi los puntos más emblemáticos de la ciudad, aunque me quedé con ganas de pasear más.
Monté en el metro, y qué deciros.
RARO DE COJ****.
Hay que pagar recargando una especie de tarjeta y se pica en los tornos poniéndolas en ellos, tipo tarjetas magnéticas.
Qué raro.
Muuuuuuuuuucho calor.
Muuuuuuuuuuucho guiri.
Muuuuuuuuuuuuuuuuuuucho paseo.
Muuuuuuuuuuucho coche de caballos.
Muuuuuuuuuuuuucho calor.
Muuuuuuchos pedales.
Muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuucha reflex colgada de los cuellos.
Muuuuuuuuuuuucha sed.
Y muuuuuuuuuuuuuuucho calor.
En eso se puede resumir mi paseo por Sevilla centro.
Las fotos aquí disponibles, por supuesto.
También tenéis en mi Instagram las fotografías diarias que iba haciendo, que aunque pocas, bonitas.
Dentro de poca toca volver a pisar Andalucía para ver a mi familia cordobesa. El blog no va a estar demasiado activo hasta Septiembre.
Cualquier propuesta de sección será bienvenida.
MBW, Z.
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